2019, el año de los Ecoviajes
El turismo eco-amigable se está consolidando y cada vez más viajeros se suman a esta tendencia y aprenden sobre el concepto.
Aprender el concepto de sustentabilidad al viajar es actualmente necesario, nos hace enfocarnos más en la experiencia al viajar y nos devuelve con algo más al volver a casa.
2019 será el año en que esta cultura de viaje nos haga mejores viajeros y prestadores de servicios. Finalmente ha llegado la época de los EcoViajes.
2019 es el año del turismo sustentable y responsable
Como parte de un cambio hacia la conservación de los recursos naturales, algunos de los principales destinos, y los visitantes, estamos cada vez más en sintonía con el impacto ambiental que producen los viajes.
Este cambio en la mentalidad está rompiendo con algunas de las tradiciones asociadas a los lugares más visitados del mundo y está dando lugar a una tendencia en la que se enfatizan los resultados ambientalmente sostenibles como parte integral de la experiencia.
Hay que mencionar que la industria de los viajes ha sido de las de mayor crecimiento en los últimos 20 años de acuerdo a cifras de la Organización Mundial de Turismo que indica que desde el año 2000, la búsqueda de destinos en todo el mundo ha aumentado en más del 50 por ciento y espera que alcance los 1.800 millones de viajeros en 2030. Actualmente se estima que esta industria representa un 10% de la economía global. Este crecimiento ha generado un impacto al medio ambiente y viajar se ha convertido en una actividad que tiene un gran impacto ambiental, por eso cada vez más viajeros y prestadores de servicios son conscientes y ofrecen opciones para reducir o incluso mitigar completamente el impacto producido por la acción de viajar.
Para que un destino o actividad se pueda considerar como sustentable debe cumplir con algunos requisitos básicos, entre ellos los más importantes serían: apoyar a las empresas locales, conservar los recursos naturales y alentar a los visitantes a participar en la comunidad.
La responsabilidad de los destinos está en adoptar estos principios y aunque parezca complejo al largo plazo se ve que mantener estas "reglas" hacen que los atractivos naturales se preserven mejor y por más tiempo, garantizando el ingreso y sustento de muchas familias.
Conoce la lista del Top 100 de la organización Green Destinations, entre ellas solamente aparece un destino en México: La Reserva de la Biosfera de la Sierra Gorda en Querétaro ¿Qué podemos y debemos hacer en México para aumentar nuestra presencia en la lista?
Un ejemplo que encontramos en nuestra investigación para este post es el de la "Laguna Azul" en Islandia, un balneario de aguas geo-termales que vio un crecimiento muy importante en la década del año 2000 y que motivo el crecimiento de la economía de la región y el bienestar de decenas de familias, sin embargo el impacto que se creo en el entorno fue tal que llevó a la evolución del servicio, al punto de que ahora el parque está considerado como un parque protegido por la UNESCO y el objetivo de atracción de turistas se ha segmentado para atraer a visitantes con un interés especifico en actividades de salud y naturaleza.
Laguna Azul en Islandia, ejemplo de turismo sustentable.
Otro ejemplo es el del Parque Nacional Islas Surin en Thailandia, uno de los destinos más populares para el buceo que de igual manera vio un gran crecimiento al principio del siglo XXI y que genero un fuerte impacto negativo en los Mokens, una tribu marinera nómada indígena de la región. Con el paso del tiempo el modelo de servicio ha evolucionado al punto que ahora los visitantes interesados participan en actividades que aporten algo a esta tribu, con actividades voluntarias y de servicio que regresan algo ante el potencial impacto sobre la región. Estas actividades aumentan la riqueza de la experiencia del viajero de tal manera que ahora hay más turistas interesados en estas actividades que solamente las de exploración marina.
Parque Nacional Islas Surin en Thailandia
2019 es el año en que debemos entender finalmente que creamos un gran impacto en el medio ambiente al viajar y que tenemos la responsabilidad de reducir ese impacto. La misma conciencia debe existir en los prestadores de servicios. Si se acaba el atractivo se acaba el negocio, es lógico ¿no?
